Cuestiones abarcadas por los Comités y Acuerdos de la OMC
EXÁMENES DE LA POLÍTICAS COMERCIALES: PRIMER COMUNICADO DE PRENSA, RESUMEN DEL INFORME DE LA SECRETARÍA Y DEL INFORME DEL GOBIERNO

Fiji: abril de 1997

COMMUNICADO DE PRENSA
PRENSA/TPRB/53
1 de abril de 1997

FIJI TRATA DE DIVERSIFICAR SUS EXPORTACIONES BUSCANDO ALTERNATIVAS A LAS EXPORTACIONES TRADICIONALES Y FOMENTA LA INVERSIÓN EXTRANJERA

La economía de Fiji se enfrenta con numerosos desafíos al tratar este país de diversificar sus exportaciones buscando alternativas a las exportaciones tradicionales, continuar sus reformas económicas y atraer un importante volumen de inversiones extranjeras. Tras haber adoptado estrategias de desarrollo más orientadas al mercado y al exterior a finales del decenio de 1980, la economía de Fiji experimentó una breve recuperación -inducida principalmente por un aumento de los ingresos obtenidos del azúcar, las exportaciones de prendas de vestir y el turismo- antes de volver a desacelerarse en el decenio de 1990.

En el nuevo informe de la Secretaría de la OMC sobre las políticas y prácticas comerciales de Fiji se afirma que el reciente cambio desfavorable de la coyuntura económica se debe fundamentalmente a la falta de inversiones extranjeras y a que Fiji está intentando atraer más capital extranjero mediante una agilización de los procedimientos de inversión y la concesión de incentivos fiscales. En el informe se señala también que Fiji está tratando de reponer el capital humano del país, así como de abordar los problemas relativos a la renovación de los contratos de arriendo de tierras en el sector del azúcar.

    La industria del azúcar realiza el 40 por ciento del total de las exportaciones y contribuye en un 11 por ciento al PIB de Fiji. Se exporta el 90 por ciento aproximadamente de la producción de azúcar sin refinar, vendiéndose más de la mitad con arreglo a acuerdos preferenciales, principalmente a la Unión Europea, en el marco del Convenio de Lomé, y a Australia y Nueva Zelandia, en el marco del Acuerdo Regional de Cooperación Comercial y Económica en el Pacífico Sur (SPARTECA). Las prendas de vestir son la principal manufactura de exportación del país (constituyen casi el 30 por ciento de las exportaciones), y su producción se quintuplicó de 1986 a 1995. El plan de factorías francas/zonas francas de Fiji, que concede exenciones de los impuestos sobre los ingresos de exportación que totalicen más de 6.600 dólares anuales, ha contribuido a que las exportaciones de prendas de vestir se hayan duplicado desde finales del decenio de 1980. En el informe se señala que las ventajas que el comercio preferencial supone para Fiji en lo que respecta a sus exportaciones de azúcar y prendas de vestir se está erosionando progresivamente, a medida que los países industrializados reducen sus aranceles sobre estos artículos. Asimismo, se observa que, para seguir siendo competitivos, estos dos sectores tendrán que aumentar su eficiencia.

En el informe de la OMC, que será examinado por el Órgano de Examen de las Políticas Comerciales los días 9 y 10 de abril de 1997, se indica que el régimen comercial de Fiji se ha simplificado considerablemente desde 1989 y que se ha suprimido la mayoría de los requisitos en materia de licencias de importación. Se han dejado de conceder subvenciones a algunos productos básicos, y los aranceles máximos que se aplicaban a casi todas las líneas arancelarias se han reducido del 50 por ciento en 1991 al 22,5 por ciento. El promedio aritmético de los aranceles n.m.f. de Fiji (excluidos los efectos de los derechos específicos) era en 1996 del 12,4 por ciento. Los gravámenes en frontera representaron en 1995 alrededor del 46 por ciento de los ingresos fiscales de Fiji.

En el informe se señala que Fiji no aplica a la producción interna prescripciones en materia de contenido nacional, y no ha recurrido a salvaguardias ni a derechos antidumping ni compensatorios. En 1993 se suprimió y sustituyó por aranceles el régimen de licencias que protegía de la competencia internacional al sector de los productos lácteos. La principal medida oficial de ayuda a la agricultura es la protección arancelaria, y las exportaciones de frutas, legumbres y hortalizas, incluidas las de tubérculos, están sujetas a licencias. El Estado es propietario de varias empresas comerciales agrícolas. La Fiji Sugar Corporation (FSC) es el único comprador de caña de azúcar y productor de azúcar sin refinar.

    En el informe se observa que el comercio de servicios, especialmente el turismo, ocupa un lugar importante en las cuentas exteriores de Fiji. La Lista de Compromisos Específicos de Fiji en el marco del Acuerdo General sobre el Comercio de Servicios (AGCS) abarca servicios relacionados con el turismo y los viajes, como hoteles, moteles, otros alojamientos turísticos y restaurantes. En ese ámbito Fiji se ha comprometido a no limitar el acceso al mercado ni el trato nacional para el suministro transfronterizo, el consumo en el extranjero y la presencia comercial, aunque se aplican algunas limitaciones a la presencia comercial en el acceso al mercado. Fiji no participó en las negociaciones de la OMC sobre telecomunicaciones básicas ni sobre transporte marítimo.

    El sector turístico, junto con la distribución, el transporte y las comunicaciones, representa alrededor del 20 por ciento del PIB. Los proyectos aprobados para la construcción o la ampliación de hoteles pueden recibir una ayuda de inversión. En cuanto a los servicios financieros, que representa el 13 por ciento del PIB, en el informe se señala que la regulación del sector bancario y financiero compete al Banco de la Reserva de Fiji. Sólo pueden realizar actividades bancarias las instituciones financieras, que pueden ser bancos comerciales o instituciones de crédito. Aunque las compañías de seguros extranjeras no pueden anunciar o vender sus servicios, en principio no se aplica ningún límite a la participación extranjera en servicios financieros. Sin embargo, el Banco de la Reserva alienta la participación nacional en los servicios de cambio y transacciones en divisas para fines relacionados con los viajes.

    Si bien no existe en Fiji legislación específica en materia de competencia, siguen aplicándose controles de precios a alrededor del 35 por ciento de los productos. La privatización de empresas públicas está todavía en la fase de planificación. En cuanto a la legislación en materia de derechos de propiedad intelectual, en el informe se indica que Fiji se propone velar por que ésta sea compatible con el Acuerdo de la OMC sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio. En la actualidad se están examinando las disposiciones del Acuerdo para determinar si será necesario introducir modificaciones en la legislación nacional.

    En las conclusiones del informe se observa que la capacidad de Fiji para hacer frente a los desafíos que se le plantean y los resultados de los esfuerzos que realiza para diversificar su economía buscando alternativas a las exportaciones tradicionales dependerán de que se consiga o no reactivar las inversiones extranjeras. La aceleración de las privatizaciones, unida a la continuación del proceso de liberalización y desreglamentación del régimen comercial, contribuirá a promover la eficiencia económica de Fiji.

Nota para las redacciones

    El Órgano de Examen de las Políticas Comerciales (OEPC) de la OMC examinará el informe de la Secretaría de la OMC, junto con un informe elaborado por Fiji, los días 9 y 10 de abril de 1997. El Órgano de Examen de las Políticas Comerciales de la OMC realiza una evaluación colectiva de la gama completa de las políticas y prácticas comerciales de cada Miembro de la OMC a intervalos regulares, y sigue de cerca las tendencias y acontecimientos importantes que puedan tener consecuencias para el sistema mundial de comercio. Los dos informes citados, junto con un acta del debate del OEPC y el resumen del Presidente, se publicarán oportunamente como documentación completa del examen de las políticas comerciales de Fiji. Podrán obtenerse en la Secretaría de la OMC, Centro William Rappard, 154 rue de Lausanne, 1211 Ginebra 21.

    Los informes abarcan la evolución de todos los aspectos de las políticas comerciales de Fiji, como las leyes y reglamentos nacionales, el marco institucional, las prácticas comerciales por clase de medidas y las políticas comerciales por sectores. Desde la entrada en vigor del Acuerdo sobre la OMC, los informes abarcan también las "nuevas esferas" del comercio de servicios y los aspectos de los derechos de propiedad intelectual relacionados con el comercio. Se adjuntan las observaciones recapitulativas del informe de la Secretaría y del Gobierno. Los periodistas que deseen disponer del texto íntegro de los informes pueden solicitarlo a la Secretaría de la OMC.

    Desde diciembre de 1989, se han llevado a cabo los siguientes exámenes: Argentina (1992), Australia (1989 y 1994), Austria (1992), Bangladesh (1992), Bolivia (1993), Brasil (1992 y 1996), Camerún (1995), Canadá (1990, 1992, 1994 y 1996), Colombia (1990 y 1996), las Comunidades Europeas (1991, 1993 y 1995), Costa Rica (1995), Côte d'Ivoire (1995), Chile (1991), Egipto (1992), El Salvador (1996), Estados Unidos (1989, 1992, 1994 y 1996), Filipinas (1993), Finlandia (1992), Ghana (1992), Hong Kong (1990 y 1994), Hungría (1991), India (1993), Indonesia (1991 y 1994), Islandia (1994), Israel (1994), Japón (1990, 1992 y 1995), Kenya (1993), Macao (1994), Malasia (1993), Marruecos (1989 y 1996), Mauricio (1995), México (1993), Nigeria (1991), Noruega (1991 y 1996), Nueva Zelandia (1990 y 1996), Pakistán (1995), Perú (1994), Polonia (1993), la República Dominicana (1996), la República Checa (1996), la República de Corea (1992 y 1996), la República Eslovaca (1995), Rumania (1992), Senegal (1994), Singapur (1992 y 1996), Sri Lanka (1995), Sudáfrica (1993), Suecia (1990 y 1994), Suiza (1991 y 1996), Tailandia (1991 y 1995), Túnez (1994), Turquía (1994), Uganda (1995), Uruguay (1992), Venezuela (1996), Zambia (1996) y Zimbabwe (1994).

Informe de la Secretaría

ÓRGANO DE EXAMEN DE LAS POLÍTICAS COMERCIALES
FIJI
Informe de la Secretaría - Observaciones recapitulativas

INTRODUCCIÓN

    Fiji es un pequeño país insular del Pacífico Meridional cuya economía depende en medida importante del azúcar, del turismo y del incipiente sector del vestido. Desde finales del decenio de 1980 viene aplicando políticas más orientadas al exterior, tendentes a promover un crecimiento estable y sostenible. Aunque se han hecho progresos importantes, se ha rezagado la aplicación de algunas medidas estructurales, entre las que se cuentan las reducciones arancelarias y la reforma de las empresas públicas. No parece haberse logrado todavía restablecer la confianza quebrantada por los golpes militares de 1987; la inversión privada sigue muy por debajo del nivel alcanzado a principios del decenio de 1980, y tanto el crecimiento como el proceso de diversificación económica son todavía vacilantes.

ENTORNO ECONÓMICO

    Tras acceder a la independencia en 1970, Fiji siguió una estrategia de sustitución de importaciones, autosuficiencia y fuerte participación del Estado en la actividad económica. En un principio los resultados económicos fueron buenos, pero en el decenio que concluyó en 1986 se registraron bajas tasas de crecimiento, como consecuencia de las distorsiones y rigideces económicas impuestas por una estrategia de desarrollo cerrada al exterior. La economía sufrió un grave revés en 1987, en gran medida como consecuencia de sucesivos golpes militares; se registró una rápida pérdida de confianza, muchos residentes abandonaron el país, y esa situación afectó gravemente al turismo.

    A finales de 1987, Fiji emprendió un importante cambio de rumbo al adoptar una estrategia de desarrollo más orientada al mercado y al exterior. La liberalización del comercio, la desreglamentación económica y el fomento de la inversión constituyen componentes importantes de la nueva orientación. Esas medidas contribuyeron a promover la recuperación que se registró en 1989 y 1990, impulsada por el sector azucarero, el turismo y la incipiente industria del vestido. Sin embargo, al rezagarse las inversiones, el crecimiento económico se desaceleró durante el decenio de 1990, y el PIB real aumentó en promedio a una tasa anual de alrededor de 2,5 por ciento durante el período comprendido entre 1991 y 1995.

    Fiji ha procurado cimentar su proceso de ajuste estructural en mejoras de la gestión macroeconómica. El presupuesto registró un superávit en 1990, pero volvió después a ser deficitario, hasta llegar en 1995 a una situación de práctico equilibrio, gracias al aumento de la recaudación fiscal y a un mayor control de los gastos. El crecimiento de la masa monetaria ha sido disciplinado, y la inflación osciló a principios del decenio de 1990 entre un 5 y un 8 por ciento, y se redujo posteriormente a menos del 5 por ciento. De ahí que el tipo de cambio efectivo real haya sido relativamente estable, lo que ha contribuido a mantener la competitividad de las exportaciones.

    Las perspectivas de crecimiento de Fiji pueden verse limitadas por la persistencia de un elemento de incertidumbre en cuanto a la situación política y al régimen de tenencia de la tierra, que han contribuido al descenso de las inversiones y a la continuación de la corriente migratoria. El Gobierno está tratando de abordar el problema agilizando los procedimientos de inversión y otorgando incentivos fiscales a los inversores; también se propone reponer el capital humano, para lo que planea introducir la escolarización primaria obligatoria para el año 2000. La renovación de los contratos de arriendo de tierras en el sector del azúcar es una cuestión de gran importancia política y económica, que está íntimamente imbricada con las relaciones entre los dos principales grupos de población.

FIJI EN EL COMERCIO MUNDIAL

    El déficit comercial registrado históricamente por Fiji ha sido contrarrestado en gran medida por los ingresos en la cuenta de servicios, derivados en particular del turismo. La balanza de pagos ha permanecido aproximadamente en equilibrio, y el nivel de las reservas se mantiene desde 1993 relativamente estable, holgadamente por encima de los cuatro meses de importaciones.

    Como consecuencia del descenso de las inversiones, la proporción de la maquinaria en el total de las importaciones de Fiji ha disminuido en los últimos tiempos, aunque ha aumentado la de las manufacturas. En el decenio de 1990 disminuyó la proporción de productos alimenticios en las exportaciones de Fiji, y en cambio aumentó considerablemente la de productos manufacturados, y en particular de prendas de vestir. El azúcar representa casi el 40 por ciento de las exportaciones, y alrededor de la mitad se exporta a mercados que ofrecen acceso preferencial, principalmente los de la Unión Europea.

    Las importaciones de Fiji proceden principalmente de Australia y de Nueva Zelandia, cuya participación ha aumentado considerablemente en los últimos años. Alrededor de la mitad de las exportaciones de Fiji se dirigen a Australia y al Reino Unido, y los Estados Unidos constituyen un destino cada vez más importante.

MARCO JURÍDICO E INSTITUCIONAL

    Fiji es una República multipartidista, en la que el poder ejecutivo reside en el Presidente. El Primer Ministro, nombrado por el Presidente, es el Jefe del Gobierno; la formulación de políticas compete al Consejo de Ministros. Los principales ministerios que se ocupan de cuestiones relacionadas con el comercio internacional son el Ministerio de Comercio, Industria y Empresas Públicas y el Ministerio de Hacienda y Desarrollo Económico. Con la excepción de los aranceles, que son competencia del Ministerio de Hacienda y Desarrollo Económico, el Ministerio de Comercio, Industria y Empresas Públicas está directamente encargado de las políticas generales aplicables al comercio de mercancías, incluidos cualesquiera controles de exportación o importación. De la aplicación de la política arancelaria se encarga el Departamento de Aduanas e Impuestos de Consumo, dependiente del Ministerio de Hacienda y Desarrollo Económico. Las políticas relacionadas con los servicios competen a varios ministerios, entre los que destacan el Ministerio de Hacienda y Desarrollo Económico y el Ministerio de Turismo y Aviación Civil.

CARACTERÍSTICAS Y TENDENCIAS DE LA POLÍTICA COMERCIAL

    Fiji se convirtió en Miembro de la OMC en enero de 1996. Otorga a todos los países con los que comercia por lo menos trato arancelario n.m.f. Como parte de los compromisos contraídos en la Ronda Uruguay, Fiji consolidó todos sus aranceles agropecuarios y alrededor del 43 por ciento de las líneas arancelarias industriales. Ha contraído también, en el marco del Acuerdo General sobre el Comercio de Servicios (AGCS), compromisos en el sector turístico.

    Fiji es signatario de la Convención de Lomé, en virtud de la cual la Unión Europea (UE) otorga preferencias comerciales no recíprocas a los países de África, el Caribe y el Pacífico (Estados ACP). El total de la ayuda prestada por la UE a Fiji en el período 1989-1995 ascendió a 75,5 millones de dólares de Fiji. Fiji es parte en el Acuerdo Regional de Cooperación Comercial y Económica en el Pacífico Sur (SPARTECA), acuerdo preferencial no recíproco que abarca a los países insulares miembros del Foro del Pacífico Sur y Australia y Nueva Zelandia y cuya finalidad es otorgar progresivamente a los países insulares miembros del Foro acceso franco e irrestricto a los mercados de Australia y Nueva Zelandia. Las exportaciones de Fiji acogidas al SPARTECA son principalmente productos manufacturados tales como las prendas de vestir. Fiji recibe asimismo trato preferencial de 21 países en el marco del SGP.

    Las autoridades de Fiji consideran que la inversión extranjera directa es fundamental para promover la aceleración del crecimiento económico. Se aplica en esa esfera el principio general del trato nacional, por lo que los incentivos se otorgan por igual a inversores extranjeros y nacionales. Para facilitar las corrientes de inversión extranjera directa, en la Junta de Comercio e Inversiones de Fiji se centralizan las funciones de promoción, regulación y control de la inversión extranjera. El proceso de aprobación de la inversión extranjera directa es discrecional, y las decisiones se adoptan atendiendo a directrices ministeriales y no en aplicación de las disposiciones de una ley. Por lo general se desalienta la adquisición por inversores extranjeros de una participación mayoritaria en empresas ya establecidas de propiedad de nacionales. Para la venta a no residentes de acciones u otros valores de empresas de Fiji ha de obtenerse previamente la aprobación del Banco de la Reserva de Fiji.

TIPO E INCIDENCIA DE LOS INSTRUMENTOS DE POLÍTICA COMERCIAL

    Desde 1989 se ha liberalizado y simplificado el régimen comercial de Fiji, por medio, entre otras medidas, de la supresión del régimen de licencias para la mayor parte de las importaciones, la reducción de los tipos arancelarios y la retirada de las subvenciones a algunos productos básicos.

    Los aranceles son actualmente el principal instrumento de política comercial. Se ha simplificado la estructura arancelaria, y el arancel ad valorem máximo aplicable a casi todas las líneas arancelarias se ha reducido del 50 por ciento en 1991 al 22,5 por ciento, tipo que está todavía por encima del 20 por ciento previsto originariamente. El promedio aritmético de los aranceles n.m.f. de Fiji (excluidos los efectos de los derechos específicos) era en 1996 del 12,4 por ciento. Se aplican aranceles ad valorem a alrededor del 96 por ciento de las líneas arancelarias. Otro 2 por ciento de las líneas, correspondiente en su mayor parte a bebidas, tabaco, combustibles minerales y fuegos de artificio, está gravado con derechos específicos. Las líneas restantes, principalmente neumáticos y vehículos, están sujetas a tipos alternativos. Los gravámenes en frontera representaron en 1995 alrededor del 46 por ciento de los ingresos fiscales del Gobierno.

    La estructura arancelaria de Fiji presenta cierta progresividad, pues se aplican tipos más elevados a los productos elaborados. La mayor parte de los aranceles agropecuarios están consolidados a un tipo máximo del 40 por ciento, con la excepción del arroz, la leche en polvo, el alcohol y los productos de tabaco; en la industria los tipos están consolidados al 40 por ciento. Los tipos efectivamente aplicados son por lo general muy inferiores a los consolidados. Fiji otorga preferencias arancelarias a algunas de sus importaciones de Tonga y Papua Nueva Guinea en el marco de acuerdos comerciales bilaterales, a condición de que se cumplan determinadas normas de origen. En general, se otorgan concesiones arancelarias a la industria para la importación de maquinaria y de materias primas destinadas a actividades de elaboración.

    Fiji adoptó el 1. de enero de 1997 los métodos estipulados en el Acuerdo sobre Valoración en Aduana de la OMC. Se aplican algunas prohibiciones y controles de importación por razones ambientales, de salud, de moral pública y de seguridad, y de conformidad con lo dispuesto en acuerdos internacionales. Desde 1989 se ha eliminado la mayor parte de los controles específicos por licencias de importación, que se han sustituido por aranceles, salvo en el caso de las importaciones de algunos productos, como los aceites lubricantes, a fin de garantizar su conformidad con las normas técnicas correspondientes. No se aplican restricciones cuantitativas.

    Fiji está empezando a elaborar sus propias normas. La política en materia de cuarentena y de reglamentos sanitarios y fitosanitarios se ha modificado recientemente con el fin de facilitar el comercio, sustituyéndose el criterio de "riesgo cero" por el de "riesgo mínimo". En materia de contratación pública, todos los contratos por un importe superior a 30.000 dólares de Fiji deben adjudicarse por licitación competitiva, sin discriminación, en principio, contra los proveedores extranjeros. Fiji no aplica a la producción interna prescripciones en materia de contenido nacional, y no ha recurrido a salvaguardias ni a derechos antidumping ni compensatorios.

    El azúcar y el oro están sujetos, con fines de recaudación fiscal, a un modesto derecho de exportación. Se aplican algunos controles de exportación, principalmente por motivos culturales, sanitarios o ambientales o en aplicación de convenios internacionales. Se necesitan licencias específicas para la exportación de determinados productos, como el azúcar, el salvado de trigo, la harina de copra, algunas maderas y determinadas especies animales. Fiji no aplica contingentes de exportación ni limitaciones voluntarias de las exportaciones, y, según las autoridades, no subvenciona ninguna de sus exportaciones de mercancías ni de servicios, de conformidad con sus obligaciones en el marco de la OMC.

    Se puede solicitar el reintegro de los derechos sobre el componente importado de los productos de exportación si en el proceso de producción en el país se modifica la clasificación de 4 dígitos del SA. El IVA se aplica a un tipo nulo a todas las exportaciones de Fiji. Las empresas están exentas de impuestos sobre los ingresos de exportación, a condición de que el valor de sus exportaciones sea superior a 10.000 dólares de Fiji al año. El plan de factorías francas/zonas francas ofrece ventajas financieras a las empresas extranjeras que se establezcan en Fiji. El otorgamiento de la condición de factoría franca conlleva determinados requisitos en materia de exportaciones. Las factorías francas pueden importar en régimen de franquicia los bienes de capital, el equipo, los componentes y las materias primas necesarios para su establecimiento. El Servicio de Financiación de Créditos a la Exportación ayuda a los exportadores a obtener créditos anteriores o posteriores a la expedición, a tipos de interés favorables.

    No hay en Fiji subvenciones directas a la producción, pero se ofrecen diversas ventajas fiscales a la inversión y a la producción. Las empresas consideradas nuevas industrias están exentas del impuesto sobre la renta por un período de hasta ocho años. Las disposiciones de depreciación acelerada suponen ventajas importantes para todos los sectores, salvo para la agricultura. No existe en Fiji legislación específica en materia de competencia. Siguen aplicándose controles de precios a alrededor del 35 por ciento de los productos. La privatización de empresas públicas está todavía en la fase de planificación.

    Fiji se propone velar por que toda su legislación pertinente en materia de derechos de propiedad intelectual esté en conformidad con el Acuerdo de la OMC sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio. En la actualidad se están examinando las disposiciones del Acuerdo para determinar si será necesario introducir modificaciones en la legislación nacional.

POLÍTICAS SECTORIALES

AGRICULTURA

    En conjunto, la agricultura, la pesca y la silvicultura aportan alrededor del 20 por ciento del PIB de Fiji y más de la mitad de sus exportaciones. La producción de azúcar y la agricultura de subsistencia son las actividades dominantes en el sector agrícola. La principal medida de apoyo oficial a la agricultura es la protección arancelaria. Las exportaciones de fruta, legumbres y hortalizas, incluidas las de tubérculos, están sujetas a la concesión de una licencia. También se aplica un régimen de licencias a las exportaciones de determinados productos sujetos a normas de cuarentena e inspecciones del proceso de producción. El Estado es propietario de varias empresas comerciales agrícolas. La Fiji Sugar Corporation (FSC) es el único comprador de caña de azúcar y productor de azúcar sin refinar.

    El Gobierno alienta activamente la ulterior elaboración de las materias primas en el sector agropecuario. Los particulares y las empresas que se dedican a las actividades agrícolas designadas están exentos del pago de impuestos por un plazo de cinco años y pueden deducir las pérdidas de otros beneficios e imputarlas indefinidamente a ejercicios posteriores hasta su total deducción de beneficios futuros. Los gastos en actividades de mejora de las tierras pueden amortizarse en el mismo año en que se efectúan o a lo largo de cinco años. El Gobierno presta apoyo al sector de la copra, que es una fuente importante de ingresos de exportación, por medio de un fondo de estabilización de los precios. Fiji no aplica programas de apoyo directo a los ingresos de los productores ni de subvenciones alimentarias a los consumidores.

    El sector del azúcar representa alrededor del 40 por ciento de las exportaciones totales de mercancías y del 11 por ciento del PIB de Fiji. La producción de azúcar aumentó durante el decenio de 1990, aunque con considerables variaciones anuales imputables a factores climáticos y sociales. Se exporta alrededor del 90 por ciento del azúcar bruto; más de la mitad se vende en el marco de acuerdos preferenciales, principalmente a la UE.

    En 1993 se suprimió y se sustituyó por aranceles el régimen de licencias que protegía de la competencia internacional al sector de los productos lácteos. El sector pesquero aporta alrededor del 1 por ciento del PIB; se ofrecen por lo general ventajas fiscales para la pesca de alta mar. Las principales exportaciones son el atún enlatado y el pescado fresco refrigerado. El sector forestal representa el 1 por ciento del PIB, y su principal producto de exportación es la madera aserrada; están prohibidas las exportaciones de madera en rollo.

INDUSTRIA

    El sector minero representa entre el 2 y el 3 por ciento del PIB y el 10 por ciento de las exportaciones. El principal producto del sector es el oro. Cuando una empresa minera se considera beneficiosa para el desarrollo económico de Fiji, puede otorgársele una exención o reducción de impuestos durante un período determinado.

    El sector manufacturero representa aproximadamente el 12 por ciento del PIB. Destacan en él la molienda de azúcar, la elaboración de alimentos, la producción de bebidas y manufacturas de tabaco y los textiles y el vestido. El principal instrumento de protección oficial al sector manufacturero son los aranceles. El apoyo oficial al sector consiste principalmente en exenciones fiscales a las factorías francas que cumplen las prescripciones en materia de exportación.

    Las prendas de vestir son actualmente la principal manufactura de exportación. Unos dos tercios del empleo corresponden a empresas extranjeras. La producción de prendas de vestir se quintuplicó entre 1986 y 1995, impulsada por la introducción del plan de factorías francas; las exportaciones se han doblado holgadamente desde finales del decenio de 1980, y representan ya casi un 30 por ciento del total de las exportaciones de mercancías. Esas exportaciones gozan de acceso preferencial a Australia y Nueva Zelandia en el marco del SPARTECA y a la UE en virtud de la Convención de Lomé.

SERVICIOS

    El comercio de servicios, especialmente el turismo, representa un papel importante en las cuentas exteriores de Fiji. La Lista de Compromisos específicos de Fiji en el marco del AGCS abarcaba servicios relacionados con el turismo y los viajes, como hoteles, moteles, otros alojamientos turísticos y restaurantes. En ese ámbito Fiji se ha comprometido a no limitar el acceso al mercado ni el trato nacional para el suministro transfronterizo, el consumo en el extranjero y la presencia comercial, aunque se aplican algunas limitaciones a la presencia comercial en el acceso al mercado. Fiji no ha participado en las negociaciones de la OMC sobre telecomunicaciones básicas ni sobre transporte marítimo.

    El sector turístico, junto con la distribución, el transporte y las comunicaciones, representa alrededor del 20 por ciento del PIB. Los proyectos aprobados para la construcción o la ampliación de hoteles pueden recibir una ayuda de inversión. Se aplican asimismo en el sector otros varios incentivos.

    Como país insular, Fiji depende en medida considerable de los servicios de transporte. Ese sector está muy reglamentado; además de aplicarse normas técnicas y de seguridad, están regulados los precios del transporte en autobús y en taxi, de los vuelos nacionales y del transporte interinsular de mercancías. Los vuelos nacionales y los servicios de transporte en autobús están sujetos a un régimen de licencias de rutas.

    El Ministerio de Información, Radiodifusión, Televisión y Telecomunicaciones se encarga de expedir las licencias de telecomunicaciones y asignar frecuencias y de fijar los marcos reglamentarios. Los servicios nacionales de correos y telecomunicaciones son prestados exclusivamente por la empresa Fiji Posts and Telecommunications Ltd. (FPTL), en la que el Estado tiene una participación del 100 por ciento. Fiji International Telecommunication (FINTEL), en la que el Estado tiene una participación del 51 por ciento, es la única empresa autorizada a prestar servicios internacionales de telecomunicaciones. En 1990 se expidieron sendas licencias de telecomunicaciones por 25 años a FPTL y FINTEL para que operaran como monopolios.

    El sector de los servicios financieros representa alrededor del 13 por ciento del PIB. La regulación del sector bancario y financiero compete al Banco de la Reserva de Fiji. Sólo pueden realizar actividades bancarias las instituciones financieras, que pueden ser bancos comerciales o instituciones de crédito. Las compañías de seguros extranjeras no pueden anunciar ni vender sus servicios en Fiji. En principio no se aplica ningún límite a la participación extranjera en servicios financieros en Fiji; sin embargo, el Banco de la Reserva de Fiji alienta la participación nacional en los servicios de cambio y transacciones en divisas para fines relacionados con los viajes.

POLÍTICAS E INTERLOCUTORES COMERCIALES

    En el marco de su programa de reformas, Fiji ha dado los primeros pasos importantes hacia su integración en la economía mundial. Las medidas comerciales se aplican en forma no discriminatoria. Las consolidaciones arancelarias introducidas por Fiji como resultado de la Ronda Uruguay han aumentado considerablemente la predecibilidad de su régimen comercial.

    La economía de Fiji depende en medida considerable de los sectores del azúcar, el turismo y el vestido. La necesidad de reducir la dependencia del sector azucarero puede volverse más acuciante a medida que se vaya erosionando la situación preferencial del azúcar de Fiji en sus mercados de exportación. Esa erosión del acceso preferencial afecta también al sector del vestido, que quizás tendrá que introducir medidas de fomento de la eficiencia para seguir siendo competitivo. Sin embargo, para promover el proceso de diversificación de la economía habrá que prestar atención al problema de la escasez de personal profesional y técnico causada por las elevadas tasas de emigración del pasado decenio. Los resultados de los esfuerzos de diversificación dependerán asimismo de que se consiga o no reactivar las inversiones. La aceleración de las privatizaciones, unida a la continuación del proceso de liberalización y desreglamentación, contribuirá a promover la eficiencia económica.

Informe del Gobierno

ÓRGANO DE EXAMEN DE LAS POLÍTICAS COMERCIALES
FIJI
Informe del Gobierno

RESULTADOS MACROECONÓMICOS

    La economía de Fiji registró un crecimiento moderado del 1,4 por ciento en 1995, fundamentalmente a causa del cambio desfavorable de la coyuntura habido en sus dos sectores principales: el azúcar y el turismo. El mal tiempo influyó negativamente en la zafra y el número de turistas se estabilizó tras la estación récord en 1994. Según las estimaciones más recientes, la economía se recuperará y alcanzará un crecimiento del 4,4 por ciento en 1996. Se espera que aumente la producción de azúcar y oro. Según proyecciones, el número de turistas será superior al de 1995. A plazo medio, la perspectiva es de un crecimiento sostenible anual del 3 por ciento en los tres años próximos.

    El crecimiento económico de Fiji en los tres últimos años se logró fundamentalmente gracias a los buenos resultados del sector exportador. El tipo de cambio favorable, el aumento de la demanda de nuestras exportaciones, la existencia de mercados de exportación seguros, el aumento de la producción y nuestra capacidad de suministrar en todo momento los productos que exportamos han sido algunos de los factores que han contribuido a este crecimiento. Además, la política oficial de fomento de las exportaciones ha aumentado y diversificado las exportaciones no tradicionales gracias al aumento de las inversiones extranjeras e internas efectuadas acogiéndose al plan de factorías y zonas francas. La mundialización ha ayudado a diversificar los mercados.

    Se espera que la cuenta corriente de la balanza de pagos arroje superávit en 1996 y a plazo medio. En cuanto a la reserva de divisas de Fiji, la situación es desahogada, pues cubre unos cinco meses de importaciones. La deuda externa asciende aproximadamente al 8,1 por ciento del PIB, y el servicio de la deuda externa, cifrado en un 2,5 por ciento, es relativamente bajo y sigue disminuyendo. En febrero de 1997, la inflación fue del 3,2 por ciento, más o menos similar a la de los principales países que comercian con Fiji.

    Fiji tiene conciencia de las arduas tareas que le esperan para aprovechar plenamente sus posibilidades de crecimiento económico y progreso social. Concretamente, las autoridades son conscientes de la amenaza que su déficit fiscal en aumento podría suponer en cuanto a disminuir el ahorro interno, desplazar inversiones del sector privado, fomentar la inflación y disminuir la competitividad internacional. Se prevé que el déficit aumente de menos del 1 por ciento del PIB en 1995 a más del 7 por ciento en 1996 y que además supere el 8 por ciento en 1997. Ahora bien, a medio plazo se disminuirá la magnitud del déficit -si no se consigue eliminar totalmente- y la deuda se reducirá a un nivel tolerable. Será preciso desplegar esfuerzos permanentes para alcanzar el objetivo de las autoridades de un presupuesto equilibrado y niveles de deuda razonables a plazo medio.

    Las autoridades seguirán propiciando un entorno favorable al crecimiento del sector privado y desempeñando al respecto una función catalizadora. Conforme a este objetivo, centrarán su acción en lo siguiente: el perfeccionamiento de los recursos humanos del país, el desarrollo y la mejora de la infraestructura y el fomento de la competitividad interna e internacional mediante la mejora de la eficiencia de la mano de obra y los servicios.

POLÍTICAS Y PRÁCTICAS COMERCIALES

    Desde 1987, la liberalización del comercio, la desreglamentación económica y el fomento de las inversiones son los elementos esenciales de la nueva estrategia de desarrollo de Fiji. En 1989, las autoridades dieron a conocer un programa global de reforma estructural, cuyo objeto es mejorar las perspectivas de crecimiento a más largo plazo. Para ello, Fiji emprendió un programa gradual de supresión de las restricciones cuantitativas y disminución de los aranceles de las importaciones; desreglamentación del mercado financiero; supresión de las directrices legales sobre salarios y fomento de la negociación salarial por empresas; reforma fiscal; reforma de las empresas públicas; y fomento y desarrollo de las exportaciones.

    Los objetivos de las políticas comerciales de Fiji son la supresión paulatina de las licencias y restricciones cuantitativas y la liberalización y promoción del comercio. Fiji alienta la diversificación comercial promoviendo la exportación de bienes y servicios no tradicionales. Partiendo de que el sector privado es el motor del crecimiento económico, se despliegan esfuerzos encaminados a crear un entorno favorable al crecimiento del sector privado, para lo cual Fiji está haciendo lo necesario para establecer una formulación y unas orientaciones claras y transparentes en materia de políticas de inversión. Además, uno de los temas previstos a los que más importancia se concede es el fomento de un entorno comercial leal.

    Ya se han promulgado tres importantes instrumentos legales: el Decreto sobre pesos y medidas de 1989, gracias al cual se garantiza el fiel cumplimiento de las disposiciones sobre embalaje y etiquetado del contenido de los productos; el Decreto sobre el comercio leal de 1992, cuyo objeto es fomentar un entorno comercial para la actuación de los consumidores y empresas, en el que todos los participantes en el mercado sean tratados leal y equitativamente; el Decreto sobre normas comerciales y control de calidad de 1992, gracias al cual los bienes y servicios importados, manufacturados y distribuidos en Fiji se ajustan a normas uniformes.

    En su exposición de políticas, Fiji ha hecho hincapié en la necesidad de velar por la competitividad de los productos de Fiji en los mercados internacionales y de mejorarla. En gran medida, el crecimiento de las exportaciones no tradicionales y del sector manufacturero se debe a la importancia atribuida al fomento de las exportaciones. Fiji reconoce que el sector privado, actuando en mercados abiertos, será la fuerza motriz de la economía. Un sector privado eficiente y en expansión será el principal creador de empleo y fuente de aumento de los ingresos.

OBJETIVOS Y EVOLUCIÓN DE LA POLÍTICA COMERCIAL SECTORIAL

    La industria azucarera predomina en el sector agrícola y realiza el 82 por ciento de las exportaciones agrícolas. En el futuro seguirá siendo el elemento central del sector agrícola. Al mismo tiempo, las autoridades dirigirán sus esfuerzos en los próximos años a la diversificación de la producción agrícola para desarrollar otros cultivos que generen ingresos de exportación. Fiji ha determinado ya los productos agrícolas, aparte el azúcar, en los que posee una ventaja comparativa y que ofrecen las mayores posibilidades de ingresos a la exportación: coco y copra, jengibre, dalo, yaqona y frutas y legumbres y hortalizas frescas. A partir de 1997, las autoridades concentrarán sus esfuerzos en estos cultivos. Al tiempo que reconoce la importancia de orientarse hacia la exportación, Fiji tiene presente la necesidad de alcanzar la seguridad alimentaria, sobre todo por ser un país propenso a catástrofes climáticas y otras catástrofes naturales.

    Las exportaciones de productos del mar aumentan rápidamente, en particular las de atún fresco en "sashimi", perlas y cohombros de mar. El objetivo fundamental de la política pesquera del Gobierno es aumentar la producción orientada hacia la exportación de todos los productos marinos y, al mismo tiempo, alcanzar la sostenibilidad a largo plazo de sus recursos marinos.

    Fiji espera que para el año 2000 sus ingresos por exportación de productos madereros asciendan a 100 millones de dólares. Gracias al programa oficial de repoblación forestal, se han plantado 50.800 hectáreas de bosques de frondosas y está previsto plantar 85.000 antes del año 2000. Conforme a la política oficial de reforma de las empresas públicas, se ha efectuado un estudio de viabilidad de la transformación en sociedades anónimas de las plantaciones de frondosas, que está analizando el Gobierno. Se fundará una Compañía de Gestión de Plantaciones de Frondosas que se encargará de administrar los bosques y de preparar la tala, la elaboración y la exportación de madera a gran escala a partir del año 2000.

    Las políticas de Fiji relativas al sector manufacturero tienen por objeto mejorar la eficiencia comercial de los factores para atraer capitales extranjeros gracias a una reforma a fondo del régimen de concesión de licencias, la mejora del mercado laboral mediante una revisión de las negociaciones salariales y la disminución de las distorsiones que en el comercio y la producción ocasionan los excesivos obstáculos arancelarios y no arancelarios.

    Fiji ha dado grandes pasos en lo tocante a disminuir los obstáculos no arancelarios y los aranceles proteccionistas. En los presupuestos de 1994 y 1995 se suprimieron las licencias a la importación de todos los productos menos uno, el aceite lubricante. Al principio, unos aranceles elevados, del 50 al 70 por ciento, sustituyeron a las licencias, para que los productores del país tuvieran tiempo de ajustarse a las nuevas condiciones de competitividad. Desde entonces, en presupuestos ulteriores, se han disminuido gradualmente los aranceles, gracias a lo cual los aranceles fiscales estándar bajaron al 25 por ciento en 1993 y al 22,5 en 1995. En 1992, se implantó un Impuesto sobre el Valor Añadido que grava todos los bienes y servicios, en aplicación de las medidas de reforma fiscal que las autoridades instauraron en 1993 para ampliar la base impositiva.

    La liberalización del comercio ha tenido consecuencias muy diversas en el sector manufacturero: ha aumentado la eficiencia de algunas empresas que se han reestructurado y han puesto en práctica nuevas iniciativas, por ejemplo, inversiones en nueva tecnología, mejora de la calificación de la mano de obra, búsqueda de nuevas fuentes de insumos y nuevos mercados de exportación. Otras se han orientado más a la exportación o bien han ajustado la combinación de sus factores de producción a la nueva estructura de precios. Igualmente ha habido desplazamientos de recursos, aunque la mayoría han tenido lugar dentro de las propias empresas con escasa pérdida de puestos de trabajo. Anteriormente, las empresas locales se habían diversificado excesivamente para obtener un porcentaje mayor del mercado interno. Después de la liberalización del comercio, han reducido su campo de acción y se dedican a menos actividades, concentrándose especialmente en los sectores en los que pueden competir internacionalmente.

    Para facilitar y aumentar la competitividad internacional de las industrias, las autoridades han promulgado y puesto en práctica nuevas medidas legislativas sobre normas comerciales y control de calidad y han alentado a las empresas a adoptar la acreditación ISO 9000. Aunque el objetivo a largo plazo de las autoridades es crear una economía competitiva, a más corto plazo consideran necesario conceder incentivos que fomenten las exportaciones no tradicionales.

    Se espera que la producción del sector minero aumente en un 23 por ciento en 1997 y que a plazo medio se incremente aún más. Se espera asimismo que, gracias a la formulación y la ejecución de una Política de Minerales y a la publicación de un Documento de Promoción en 1997, la aportación prevista del sector al PIB aumente aún más conforme crezca el interés de los inversores en actividades mineras por las exploraciones mineras una vez que existan directrices normativas claras y transparentes.

    La importación de productos del petróleo representa un porcentaje considerable de la factura de energía de Fiji. A fin de mejorar la eficiencia del sector de la energía, el Organismo Público de Electricidad de Fiji (FEA) efectúa en la actualidad un ejercicio de fortalecimiento institucional para preparar la reconstrucción del sector. A finales de 1997 se pondrá en marcha la transformación del FEA en sociedad anónima. En la actualidad, el FEA es la entidad monopolista natural que produce electricidad en el país, aunque la Fiji Sugar Corporation también produce algo de energía eléctrica. El análisis de la reestructuración de este sector está dedicado en parte a estudiar las posibilidades de aumentar la competencia en la producción de electricidad. El sector del transporte es el mayor consumidor de productos del petróleo importados. Ante el aumento de la actividad económica, es probable que en el futuro aumente la importación de productos del petróleo.

    El sector de la energía desempeña un papel esencial en la producción de las exportaciones de Fiji. Para mejorar su eficiencia, se está efectuando un estudio de la necesidad de reforzamiento institucional del FEA, el único productor y proveedor de electricidad del país. Posteriormente se estudiará cómo implantar la competencia en este sector antes de su transformación en sociedad anónima. Las autoridades están empeñadas en mejorar la eficiencia de este sector. Se sigue dando alta prioridad a la electrificación rural para mejorar las condiciones de vida y acrecer las posibilidades socioeconómicas de los habitantes del campo.

    En 1993, el Gobierno de Fiji suscribió y aprobó la Estrategia Medioambiental Nacional, un programa de acción de aplicación general cuyo objeto es lograr que Fiji tenga un desarrollo sostenible. En la actualidad, el Gobierno está examinando el Proyecto de Ley sobre Desarrollo Sostenible que será el marco jurídico de la gestión ambientalmente racional de todos los sectores de la economía.

    En cuanto al sector industrial, las autoridades son conscientes de la necesidad de que las industrias comerciales participen en todos los aspectos de la planificación y la gestión ambientales. Teniendo presente este objetivo, el marco normativo de gestión ambiental y lucha contra la contaminación establecido en la nueva legislación se basa en los principios de "quien contamina paga" y "autorregulación".

    Fiji reconoce la importancia de que exista un sector de servicios eficiente para el desarrollo de sus exportaciones y la puesta en práctica de sus políticas comerciales. En 1996, este sector representó aproximadamente el 70 por ciento del PIB.

    El turismo es, con aproximadamente el 20 por ciento del PIB, la principal fuente de ingresos de exportación del país. Ofrece grandes posibilidades de crecimiento y se están haciendo esfuerzos para ampliar el abanico de servicios de turismo, entre otras cosas pasando a realizar actividades de ecoturismo y turismo cultural. La política oficial sigue poniendo el acento en la participación y los resultados del sector privado y abordando la solución de cuestiones como el acceso al país por vía aérea, la mejora de la estructura hotelera, el aumento de los productos turísticos, la promoción del país en mercados nuevos y ya existentes y el suministro de trabajadores formados para atender las nuevas necesidades de recursos humanos.

    Se han hecho progresos importantes en lo que respecta al desarrollo del mercado de capitales. La Ley de Fomento del Mercado de Capitales regulará la reforma del mercado y coordinará su ulterior desarrollo. Ha aumentado la actividad de la bolsa, en la que figuran más empresas. Un mercado de capitales activo aumentará la eficiencia de las actividades de intermediación, fomentará el ahorro interno y acrecerá la eficacia de la aplicación de la política monetaria basada en el mercado.

    El transporte aéreo desempeña una función esencial en el acarreo de los productos agrícolas y otros productos perecederos exportados. Fiji reconoce que una mayor competencia en los vuelos internacionales reforzará los cimientos en que habrá de basarse el crecimiento del comercio, el turismo y la economía nacional. En los dos años últimos han aumentado las frecuencias de los vuelos a Asia y a América del Norte, pero el sector sigue teniendo pendiente la tarea de la ulterior liberalización de los derechos de acceso a fin de que haya un número mayor de transportistas que amplíen el acceso a los mercados de Asia y Europa.

    Fiji efectúa más del 70 por ciento de sus exportaciones por vía marítima. Las autoridades reconocen la importancia de un servicio portuario eficiente y están convirtiendo en sociedad anónima el Organismo Autónomo de Puertos de Fiji para mejorar los resultados de las operaciones portuarias. Habida cuenta de la estructura geográfica del país, también es importante disponer de servicios navieros nacionales de prestigio reconocido. El transporte por vía marítima facilita nexos vitales con islas remotas, y para mejorar los servicios a las islas más alejadas, las autoridades han instaurado el plan de subvenciones a los concesionarios del servicio de transporte marítimo, el cual subvencionará a la empresa naviera privada que gane la correspondiente licitación para que atienda rutas a islas alejadas que de otro modo no serían rediticias.

    En la actualidad, Fiji tiene un sector de telecomunicaciones bien desarrollado, pero en buena medida monopolista. Según un análisis del sector efectuado en 1996, se podría mejorar considerablemente su eficiencia si las autoridades desreglamentaran el sector y permitiesen que en él hubiese competencia. Por consiguiente, las autoridades lo desreglamentarán este mismo año y la competencia hará que mejoren los servicios y disminuyan los precios del sector.

EL MARCO INSTITUCIONAL DE LAS POLÍTICAS COMERCIALES

    La administración de las políticas comerciales corresponde a varios Ministerios y Departamentos y órganos normativos oficiales: el Ministerio de Comercio, Industria y Empresas Públicas; el Ministerio de Hacienda y Desarrollo Económico, el Departamento de Tributos Interiores; el Departamento de Aduanas, la Junta de Comercio e Inversiones de Fiji y el Banco de la Reserva de Fiji.

    Varias leyes y normas constituyen el marco jurídico en que se aplican las políticas comerciales. El Gobierno está estudiando un nuevo proyecto de la Ley de Derecho de Autor que tendrá en cuenta los cambios habidos en cuestiones de derecho de autor en Fiji en los dos decenios últimos y asegurará la coherencia con el Acuerdo de la OMC sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio. Al no existir una legislación antidumping, se modificará el actual Decreto sobre el comercio leal para hacer figurar en él las cuestiones relativas al antidumping.

    La formulación y la revisión de las políticas comerciales corresponden al Ministerio de Comercio, Industria y Empresas Públicas, el cual lleva a cabo esta labor en consulta con otros Ministerios y Departamentos y órganos normativos que se encargan de otros aspectos de las políticas comerciales. Habida cuenta de la orientación de Fiji hacia una mayor participación del sector privado, se está haciendo más hincapié en celebrar consultas al respecto con las organizaciones y empresas del sector privado.

    La formulación de las políticas comerciales requiere la aprobación del Consejo de Ministros, la publicación del proyecto de ley, su aprobación por el Parlamento, la aquiescencia del Presidente y la publicación de la Ley en el Boletín Oficial. Los órganos judiciales son los encargados de resolver todos los litigios de carácter comercial.

    Habida cuenta de la apertura de su economía, Fiji ha alentado la participación en acuerdos comerciales para emplear esos canales a fin de obtener y mejorar mercados de exportación y en último término fomentar la cooperación económica internacional. Fiji ha firmado acuerdos comerciales bilaterales con Papua Nueva Guinea y Tonga y es miembro de acuerdos comerciales regionales: el SPARTECA y la Convención de Lomé entre la UE y los Estados ACP. Además de ser Miembro de la OMC, Fiji utiliza los esquemas del SGP para unos cuantos productos basados en recursos naturales. Además, Fiji se propone celebrar acuerdos comerciales bilaterales con otros países insulares del Foro del Pacífico Sur, como Vanuatu y las Islas Salomón, y está negociando otro con el Gobierno australiano.

LA APLICACIÓN DE LAS POLÍTICAS COMERCIALES

    La supresión paulatina de importantes requisitos en materia de licencias y restricciones cuantitativas ha sido un elemento capital de la reforma de las políticas comerciales de Fiji orientada a la exportación. Mientras que en 1988 había 46 productos cuya importación requería la correspondiente licencia, en 1996 sólo quedaba uno, los fluidos lubricantes e hidráulicos. Aparte del oro y el azúcar, es necesario obtener una licencia de exportación, basada en normas (tamaño mínimo), para conchas de trochus sin procesar, con objeto de evitar un exceso de explotación de las mismas.

    El arancel de aduanas de Fiji consiste en un arancel de columna única. A partir del 1. de enero de 1989, Fiji aplica plenamente el Sistema Armonizado de Designación y Codificación de Mercancías (Sistema Armonizado) del Consejo de Cooperación Aduanera (CCA) de Bruselas, para la clasificación de sus importaciones y exportaciones, sistema que sustituyó a la anterior Nomenclatura (NCCA). En la actualidad, el nivel y la dispersión de los tipos de derechos aduaneros varían entre el 0 y el 35 por ciento. Fiji otorga preferencias arancelarias a Tonga y Papua Nueva Guinea en virtud de los correspondientes acuerdos comerciales bilaterales. Fiji utilizó la Definición del Valor de Bruselas de 1950 hasta el 1. de enero de 1997, fecha en la que adoptó el Sistema de Valoración del GATT. Hasta junio de 1992, había dos clases de derechos de importación: un derecho fiscal variable impuesto por motivos de protección y obtención de ingresos y un derecho de aduana uniforme percibido adicionalmente para obtener ingresos. Con efectos a partir de julio de 1992, se suprimió el Derecho de Aduana, que fue sustituido por un Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) del 10 por ciento. Este IVA, instaurado dentro de un importante conjunto de medidas de reforma fiscal, tenía por objeto ampliar la base fiscal y disminuir la carga fiscal impuesta a los flujos comerciales extranjeros. Se pretendía con ello desplazar la obtención de ingresos fiscales de la recaudación indirecta al consumo interno.

    Las exportaciones de Fiji están sometidas en la actualidad a las siguientes disposiciones sobre normas de origen:

    -    Exportaciones a la UE: Normas de origen de la Convención de Lomé.

    -    Exportaciones a los países donantes en el marco del SGP: Normas de origen del SGP.

    -    Exportaciones a Nueva Zelandia y a Australia: Normas de origen del SPARTECA.

    Además, Fiji aplica disposiciones sobre normas de origen en los siguientes acuerdos comerciales bilaterales:

    -    Entre Fiji y Tonga.

    -    Entre Fiji y Papua Nueva Guinea.

    Las reformas tendentes a la liberalización del comercio de Fiji se iniciaron con el minipresupuesto de 1989, en el que se dispuso la sustitución por aranceles de los requisitos en materia de licencias de importación aplicables a 34 productos manufacturados. Se fijaron los tipos arancelarios entre el 50 y el 70 por ciento (sumando los derechos fiscales y aduaneros) para que los productores locales tuviesen tiempo de ajustarse a un entorno comercial cada vez más competitivo. En presupuestos posteriores se dispuso la reforma gradual de los derechos de aduana, disminuyendo los tipos arancelarios máximos y con la consiguiente disminución de los niveles arancelarios medios.

    En el presupuesto de 1990 se disminuyeron los aranceles de los textiles, los vehículos de motor y determinadas importaciones que necesitaba el sector del turismo. Además, se disminuyeron del 50 al 30 por ciento los derechos fiscales máximos impuestos a las frutas, las legumbres y hortalizas y los zumos. Los derechos fiscales que gravaban las principales importaciones industriales, como ordenadores y equipo de comunicación y de transporte, fueron rebajados del 30 al 10 por ciento. En el presupuesto de 1991 se dispuso una disminución del 50 al 40 por ciento de los derechos fiscales de la mayoría de los productos a propósito de los cuales se había suprimido en 1989 la obligación de obtener una licencia de importación. También hubo una reducción proporcional de los derechos fiscales de la mayoría de las mercancías que figuraban en el arancel de aduanas del país.

    Asimismo, se disminuyeron del 5 al 3 por ciento los derechos por exportación que gravaban el azúcar, la melaza y el oro. El presupuesto de 1995 redujo aún más el arancel fiscal ordinario en un 2,5 por ciento, hasta el 22,5 por ciento. En los presupuestos de 1996 y 1997 se ha anunciado que no se disminuirá más los aranceles fiscales ordinarios mientras no haya avanzado suficientemente la desreglamentación en otros terrenos, por ejemplo, los sectores laboral y financiero.

    Como ya se ha indicado, las autoridades aplican sin reservas su programa de liberalización comercial y supervisan estrechamente el ritmo al que proseguirá en el futuro. Habida cuenta de las preocupaciones manifestadas por los productores locales a los que ha afectado la pérdida de protección, el Gobierno efectuó sendos estudios en 1991, 1992 y 1994 para analizar las consecuencias de la liberalización del comercio. Recientemente, ha instituido un grupo independiente, formado por representantes del sector privado, para estudiar más a fondo las consecuencias de la desreglamentación de las importaciones.

EL ENTORNO ECONÓMICO Y LOS FACTORES QUE INFLUYEN EN EL COMERCIO

    En 1989, las autoridades decidieron aplicar varios elementos esenciales de política para avanzar hacia un crecimiento económico sostenible. Además, se han aplicado otras medidas de política para alcanzar este objetivo. A lo largo del tiempo, se han suavizado los controles del cambio aplicables a las inversiones extraterritoriales, los beneficios de explotación y del capital y las cuentas en divisas retenidas provenientes de los ingresos de exportación. También se suavizaron las delegaciones de facultades en los bancos comerciales y el Departamento de Aduanas e Impuestos de Consumo.

    Desde 1987, en Fiji se han desreglamentado los tipos de interés y en la actualidad prevalecen las condiciones del mercado en la determinación de todos los tipos. La instauración de una disciplina fiscal mediante disminuciones del gasto y los déficit del sector público es una prioridad de las autoridades para aumentar y sostener el crecimiento económico. Además, las autoridades elaborarán aún más y pondrán en práctica un régimen de impuestos de tipo bajo y amplia base, gracias al cual los ingresos se ajusten al ritmo del crecimiento de la economía. En la práctica, para ello habrá que mejorar la recaudación del IVA y reexaminar los costos y beneficios de los actuales incentivos fiscales.

    En cuanto a la balanza de pagos, en los últimos años la balanza global ha sido excedentaria, en buena parte gracias a los excelentes ingresos obtenidos por el turismo y el sector exportador. La cuenta corriente también ha arrojado saldos positivos, tendencia que se prevé que continuará. Se calcula que en 1996 la balanza por cuenta corriente ascenderá al 20 por ciento del PIB. Se espera que se deteriore la balanza de mercancías. A partir de 1997, la cuenta de capital de Fiji pasará a arrojar un déficit situado entre el 1 y el 2 por ciento del PIB. Se espera que aumente el nivel de reservas de divisas, que en 1996 fue equivalente a más de seis meses de importaciones, muy superior al objetivo fijado de cinco meses.

    A finales de 1996, el Parlamento promulgó la Ley de Empresas Públicas, la cual es el marco jurídico de la reforma de las empresas comerciales del Estado. En 1997, las autoridades seguirán aplicando sus políticas de reforma de las empresas públicas, centrándose en las empresas encargadas de infraestructuras -por ejemplo, los puertos, el suministro de agua y electricidad y las telecomunicaciones-, mejorando los insumos al sector privado de Fiji y disminuyendo el costo de la realización de actividades comerciales. Uno de los aspectos esenciales de las reformas es la reestructuración de la industria para suprimir los obstáculos a la competencia y crear igualdad de condiciones entre el sector privado y el público.

    En cuanto a las inversiones, en los últimos años, el total de inversiones brutas en capital fijo en porcentaje del PIB ha sido bajo, alrededor del 13 por ciento en los dos últimos años. Buena parte de la disminución de las inversiones brutas en capital fijo de los últimos años se debe a los bajos niveles de inversión del sector privado. En 1996, el Consejo de Ministros suscribió una Declaración sobre Política de Inversiones de Fiji que tiene por objeto hacer que el actual régimen de aprobación de inversiones sea más favorable a los inversores. La Política de Inversiones se basa en los principios de la transparencia, y en lugar de ser reguladora, se adapta al mercado.

    En 1996, el objetivo general de la estrategia oficial de crecimiento orientado a la exportación consistió en generar un crecimiento suficiente para absorber el elevado número de personas que ingresaban por vez primera en el mercado laboral y en mejorar el nivel de vida. Una de las condiciones esenciales para alcanzar un nivel sostenido de crecimiento económico es que exista un mercado laboral flexible y competitivo.

    Ha habido señales prometedoras respecto de la conclusión de acuerdos salariales basados en la productividad y en los resultados mediante negociaciones colectivas en las empresas, y algunas organizaciones del sector privado ya han adoptado iniciativas al respecto. La Administración Pública ha llegado a un acuerdo con los sindicatos de funcionarios para basar los acuerdos salariales en el rendimiento a partir de 1996.

    Por ser una pequeña economía abierta que depende de sólo un par de productos de exportación principales, Fiji es vulnerable a los cambios que tengan lugar en el ámbito del comercio internacional. Los dos cambios más importantes para las perspectivas y posibilidades comerciales de Fiji de todos los habidos en el entorno económico mundial son:

    -    El Acuerdo sobre la OMC, que podría hacer que bajaran los precios del azúcar y se erosionaran los márgenes preferenciales alcanzados gracias a la Convención de Lomé, aunque el Grupo de los países ACP seguirá negociando para mantener todo lo que pueda de las preferencias comerciales en el mercado.

    -    El aumento de la competencia internacional en la industria del vestido a causa de la erosión ininterrumpida de las preferencias arancelarias respecto de Australia y Nueva Zelandia previstas en el SPARTECA, y de la posterior abolición del Acuerdo Multifibras y de los contingentes de importación.

    -    En términos más generales, iniciativas como el TLC de América del Norte, el Acuerdo comercial por el que se estrechan las relaciones económicas entre Australia y Nueva Zelandia (ANZCERTA) y el compromiso alcanzado hace poco por los países del APEC de liberalizar totalmente el comercio antes del año 2020 habrán de modificar profundamente las pautas de producción y comercio, lo cual afectará gravemente a economías pequeñas como la de Fiji, con independencia de que decidan participar activamente en esas iniciativas o no.

    En el plano nacional, los exportadores de Fiji tropiezan con el gran obstáculo de alcanzar una calidad y unas normas internacionalmente competitivas. Además, la insuficiencia de conocimientos técnicos especializados y de capacidades de comercialización limita su penetración en mercados nuevos y desconocidos. La distancia de los mercados y la vulnerabilidad de las economías de las islas pequeñas siguen dificultando permanentemente el comercio.

OBSERVACIONES FINALES

    Aunque las autoridades siguen resueltas a aplicar las medidas de la política de liberalización comercial que han decidido seguir, han llegado a una fase en la que deben controlar cuidadosamente el ritmo de la liberalización de las importaciones, para alcanzar un equilibrio en el que se disminuya la protección únicamente hasta el punto en que siga aguijoneando la eficiencia, la productividad y la competitividad de los productores locales sin que ello suponga sacrificar partes importantes de la actividad económica del país. Teniendo esto presente, las autoridades aplicarán gradualmente ulteriores medidas de liberalización en el futuro, al tiempo que contemplarán con más amplitud su política de desreglamentación, a fin de disminuir la onerosa estructura actual de la actividad económica.

    Las autoridades prestarán gran atención a los marcos jurídicos necesarios para dar cabida a los cambios de políticas, y facilitar el desarrollo del sector privado será un importante aspecto de su labor. Para aumentar la transparencia, se seguirá alentando la armonización de los aranceles, los reglamentos sobre cuarentena y las normas.

    El sector de los servicios será en el futuro un importante terreno de desarrollo con miras a la exportación, y en la actualidad las autoridades están formulando una Política del Sector de los Servicios que facilitará esta iniciativa y aumentará la transparencia de los reglamentos y políticas aplicados al sector. Fiji se ha comprometido a apoyar al sector privado y seguirá haciéndolo propiciando un entorno empresarial competitivo, mejorando la infraestructura económica y perfeccionando los recursos humanos.

    Reconociendo la apertura de su economía, Fiji se ha adherido a varios foros regionales internacionales en los que participa activamente. Desde su ingreso en la Organización Mundial del Comercio el 16 de enero de 1996, y pese a la amplitud y complejidad de las consiguientes tareas, Fiji ha seguido modificando las leyes y reglamentos vigentes, actualizando sus prescripciones sobre notificación y aplicando distintas medidas conforme a los compromisos que ha asumido en la OMC. La labor preparatoria del primer Examen de las Políticas Comerciales de Fiji nos ha resultado muy provechosa. Nos permitirá, gracias a la ayuda del muy exhaustivo Informe de la Secretaría, evaluar nuestras políticas comerciales y nuestro entorno comercial a fin de obtener los mayores beneficios económicos posibles de los distintos cambios efectuados en nuestras políticas de desarrollo comercial. Fiji es consciente de la importancia de un comercio libre y abierto y, por consiguiente, seguirá aplicando su política comercial con transparencia y lealtad.